martes, 12 de abril de 2016

Tratamientos alternativos

Tratamientos alternativos

Tratamientos alternativos y complementarios

Los tratamientos alternativos son técnicas utilizadas para la mejora o la curación de algún problema de salud que con la medicina convencional no se ha podido lograr. Por lo general, la mayoría de los tratamientos no poseen un aval científico, ya que se basan en creencias y tradiciones de antiguas culturas, y precisamente por esta razón la medicina no los considera como una opción. De todas maneras y aunque muchos de ellos puedan resultar efectivos, es importante que nunca se sustituya un tratamiento médico convencional por uno alternativo, en todo caso, el mismo puede utilizarse como complemento del primero.

Según el tipo de malestar que poseamos, será el tratamiento que elijamos para poder llevar a cabo una recuperación, y en este sentido debemos decir que son muchas las opciones que nos proponen los especialistas en cada tema. Algunos de los tratamientos alternativos más utilizados, son el Reiki, que se basa en la sanación a través de la transferencia de la energía universal de persona a persona.

La reflexología, que se trata de la estimulación mediante masajes de determinados puntos representantes de los órganos vitales de nuestro cuerpo y que se encuentran situados en las plantas de los pies, aunque también se pueden trabajar los mismos puntos en manos y en ciertas partes del rostro. El Yoga y la meditación también son considerados tratamientos alternativos, pero en ambos casos, suelen aplicarse generalmente con el fin de armonizar a la persona que está siendo tratada; es decir que se trata más que nada de un tratamiento alternativo que busca el equilibrio emocional y mental de una persona.

De todos modos el yoga también suele ser muy útil para corregir algunos problemas de espalda, columna, articulaciones, huesos, etc. Si bien estas técnicas y métodos mencionadas se aplican generalmente a las dolencias físicas, también hay tratamientos alternativos que nos ayudan a recuperar la vitalidad en esos momentos de stress; un tratamiento con masajes es la mejor manera de relajarse, además, los masajes son ideales para la liberación de contracturas que suelen producirse por malas posiciones.

También nos podemos cruzar con tratamientos alternativos provenientes de la propia medicina alternativa; la medicina natural o naturista que como bien lo dice su nombre, se basa en métodos naturales para el tratamiento de diversos problemas de salud; por otra parte la fisioterapia, la kinesioterapia probablemente sean dos de los pocos tratamientos alternativos con un aval médico y clínico ya que dentro de la medicina alternativa podemos encontrar también tratamientos como la homeopatía, ayurvedica, la aromaterapia entre muchos otros que encajan más con el perfil indicado ya que como bien decíamos al comienzo del artículo, no poseen ningún aval científico que certifique sus resultados.

Tratamientos psicológicos

Si bien todos los tratamientos alternativos mencionados hacen referencia a circunstancias físicas, también existe otro tipo de tratamiento psicológico que puede resultar muy útil para aquellas personas que se encuentran envueltas en diferentes tipos de problemas y no pueden resolver. Este tipo de problemas suelen traer consecuencias a nivel emocional que paralelamente suelen afectar el desempeño de la persona en áreas importantes de su vida como pueden ser el área laboral, económica, como también en aspectos sociales y personales, dando paso a la posibilidad de alguna enfermedad grave o de diversos problemas de salud provocados por la somatización del stress que producen este tipo de situaciones.

Si bien la primera opción es consultar y asistir a sesiones de terapia psicológica, también existen algunos tratamientos alternativos entre los cuales debemos destacar la autoayuda. Este método básicamente se trata de lograr una superación personal teniendo como idea central que cada uno puede ayudarse así mismo, sin la necesidad del socorro ajeno. Éste resulta ser un tratamiento bastante efectivo, siempre y cuando sea correctamente aplicado, y generalmente los psicólogos se lo recomiendan a aquellas personas con autoestima muy baja.

El aumento de la misma se logra mediante la explotación de la propia potencialidad en los diferentes aspectos que influyen al comportamiento personal, tomando una postura de reclamo por todas las recompensas a las cuales se tiene derecho a acceder debido al esfuerzo y trabajo puesto en cada aspecto de la vida. Este tipo de tratamiento alternativo suele apoyarse con algunos libros de autoayuda que sirven de guía durante el proceso de dicho tratamiento.

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