Qué Son y
Para qué Sirven las Flores de Bach
Las Flores de Bach son unos
preparados florales artesanales que se utilizan como terapia alternativa para
tratar distintas afecciones emocionales. Esta terapia fue desarrollada por el
Dr. Edward Bach a principios del siglo pasado. Edward Bach fue médico clínico,
cirujano, especialista en el sistema inmunológico y más tarde convertido a la
homeopatía cuyos estudios e investigaciones le llevaron a concluir que
cualquier enfermedad tiene un origen emocional que, si persiste en el tiempo,
terminará por debilitar el sistema inmunológico y con ello favorecerá la
aparición de distintos tipos de enfermedades. Según su teoría, las flores de
Bach trabajan sobre el campo emocional de las personas, sanando aquellos campos
que debilitan el sistema inmune, por lo que si se restablece el equilibrio
emocional, también se restablecerá la salud.
El rechazo
de la comunidad científica
Como vez, esta teoría se acerca
bastante a los sistemas médicos tradicionales de oriente, como la medicina
china o la ayurvédica, estableciendo que el ser humano es una unidad de cuerpo,
mente y espíritu.
No podría ser de otra manera que
la comunidad científica esté en total desacuerdo con estas afirmaciones, al
igual que ocurre con la mayor parte de las terapias alternativas, que trabajan
sobre una base espiritual, humanista, filosófica e integral del ser humano.
Por una parte, la comunidad
científica alega que no existen evidencias científicas ni estudios clínicos que
confirmen que este tipo de terapias influyan en el organismo más allá del efecto
placebo, y que sus bases y preceptos chocan de frente con el conocimiento
científico establecido.
Por otra parte, los defensores,
aseguran que resulta imposible determinar ninguna prueba científica, puesto que
el propio método científico es incompatible con las premisas de las terapias
alternativas o tradicionales, que tienen en cuenta no los factores moleculares
y deterministas, sino otros muy diferentes como el efecto de las emociones, las
condiciones particulares del paciente, los hábitos, y la visión holística e
integral del ser humano que unifica cuerpo, mente y espíritu.
No olvidemos que, aunque
efectivamente la física clásica establecida por Newton choca de frente con
estas teorías, la física cuántica, que es la más avanzada, la más moderna, la
que dejó boquiabiertos a todos los científicos del mundo a principios de siglo,
sí reconoce muchas de las premisas que tiene en cuenta la medicina tradicional,
intuitiva o energética.
La teoría
del Dr. Bach
El Dr. Bach era un médico de
Gales, Gran Bretaña, que además de graduarse como médico en distintas
especialidades, también trabajó como investigador y científico comprometido con
una manera de curar a los pacientes respetuosa y benigna; algo de lo que se
sentía cada vez más alejado con la medicina alopática y por lo que terminó
acercándose a la homeopatía como terapia médica.
Fue precisamente durante su labor
en un hospital homeopático de Londres que empezó a observar que algunos
pacientes con determinadas patologías tenían ciertos rasgos personales y
emocionales en común, de modo que decidió tratar, no solo la enfermedad del
paciente, sino su personalidad. Fue entonces cuando empezó a experimentar con
las esencias florales de plantas recogidas en Gales como tratamiento para
resolver conflictos emocionales según la personalidad del paciente. En
realidad, estaba convencido de que la mente ejerce un papel determinante en las
enfermedades y de que, al solucionar las afecciones emocionales, los problemas
de salud se resolvían de una manera más definitiva y eficaz.
De este modo consiguió, según sus
investigaciones, reunir 38 remedios que son los que se utilizan en la
actualidad y que conocemos como Flores de Bach.
Beneficios
de las Flores de Bach
Las flores de Bach tienen múltiples aplicaciones:
- Para resolver enfermedades que tienen un origen emocional,
mental o psicosomático.
- En los niños suelen ejercer un efecto más potente que en las
personas adultas.
- Las flores de Bach también se utilizan en animales y plantas
(cuando se ven expuestas a cambios o condiciones adversas).
Las flores de Bach están indicadas en personas de cualquier
edad o condición, sanas o enfermas y no se conocen contraindicaciones al tomar
medicamentos u otras sustancias terapéuticas.
Qué flores
tomar
A la hora de elegir las flores
que vamos a tomar, podemos recurrir a un terapeuta especializado, o implicarnos
investigando sobre los efectos de cada flor y elaborar nuestra propia mezcla.
Para ello, es necesario revisar la lista de los 38 remedios y sus efectos. El
Dr. Bach aconsejaba que no se tomasen más de siete flores en la mezcla de
tratamiento, por lo que, si nos vemos reflejados en numerosos síntomas o
aplicaciones de las distintas flores, lo mejor es priorizar y determinar qué
problemas son los más importantes o con qué rasgos nos sentimos más
identificados hasta completar las siete flores que conformarán nuestra mezcla.
A continuación te mostramos una secuencia muy resumida de los efectos y
aplicaciones de cada flor:
- Agrimony: Ocultar preocupación tras una máscara de alegría.
- Aspen: Miedo a lo sobrenatural y a la muerte.
- Beech: Intolerancia, arrogancia, crítica desmedida.
- Centaury: No saber decir “no”.
- Cerato: Buscar la aprobación y consejo o aceptación de los
demás.
- Cherry Plum: Miedo a perder el control, ataques de terror,
miedo a la locura.
- Chestnut Bud: Incapacidad para corregir y aprender de los
errores.
- Chicory: Sobreprotección y dominación egoísta.
- Clematis: Soñar en exceso sin vivir en la realidad.
- Crab Apple: Terror a estar sucio, a contaminarse a ser
impuro.
- Elm: Exceso de responsabilidades, colapso.
- Gentian: Pesimismo, depresión, flaqueza, desesperanza.
- Gorse: Cuando se ha perdido la esperanza del todo.
- Heather: Egocentrismo desmedido, cuando todo gira entorno a
uno mismo.
- Holly: Celos, envidia, rabia, odio, rencor.
- Honeysuckle: Anclarse en el pasado sin vivir el presente.
- Hornbeam: Agotamiento psicológico y físico.
- Impatience: Impaciencia, soledad, ansiedad.
- Larch: Baja autoestima, sentimiento de fracaso.
- Mimulus: Miedo a las situaciones cotidianas y conocidas.
- Mustard: Depresión sin razón aparente.
- Oak: Personas obsesivas que trabajan incansablemente y
luchan contra corriente. Agotamiento profundo.
- Olive: Agotamiento por diversas causas físicas o mentales.
Derrota.
- Pine: Eceso de sentimiento de culpa.
- Red Chestnut: Preocupación excesiva por los seres queridos.
- Rock Rose: Ataques de ansiedad, pánico incontrolable,
estados de angustia.
- Rock Water: Personas perfeccionistas en exceso, rigidez,
exceso de control.
- Scleranthus: Incapacidad para elegir entre varias alternativas.
- Star of Bethlehem: Conmoción física o emocional.
- Sweet Chestnut: Cuando se llega al límite de la
desesperación y la desesperanza. Cuando ya no se vislumbra la luz.
- Vervain: Exceso de entusiasmo y euforia, fanatismo.
- Vine: Personas dominadoras, inflexibles y tiranas.
- Walnut: Terror a los cambios.
- Water Violet: Orgullo, sentimiento de superioridad.
- White Chestnut: Exceso de pensamientos y diálogo interno.
- Wild Oat: Dudas ante el cometido en la vida, falta de metas
y ambiciones.
- Wild Rose: Apatía, falta de motivación, tristeza.
- Willow: Victimismo, resentimiento.
Remedio de
rescate
El Dr. Bach elaboró una mezcla
estándar de cinco flores para utilizar en caso de duda o en caso de crisis de
angustia, desesperanza, estados de shock o crisis nerviosas. Este remedio
consta de cinco flores:
- Rock Rose
- Impatiens
- Cherry Plum
- Star of Bethlehem
- Clematis
¿Cómo tomar
las flores de Bach?
Si vamos a realizar un tratamiento a base de flores de Bach
y decidimos visitar a un terapeuta especializado, tomaremos la mezcla que nos
indique, las cantidades que nos indique y siguiendo las pautas que nos indique.
Pero si vamos a implicarnos y tomar nuestro propio remedio,
lo más importante en primer lugar es informarse abundantemente. Es decir, hacer
una selección de buena literatura al respecto y comprobar todas las flores, sus
efectos y sus aplicaciones.
A continuación te explicamos, de manera general, algunas
pautas para elaborar y tomar tu propia mezcla. Recuerda que esta información es
orientativa y que si decides seguir esta opción debes informarte en
profundidad. Esto es solo una aproximación para que te hagas una idea general:
- Para elaborar la mezcla necesitarás un recipiente vacío de
vidrio de 30ml con cuentagotas. Llénalo hasta los ¾ de agua mineral o depurada.
Añade 3 gotas de cada flor que quieras utilizar (máximo 7). Por último añade
unas gotas de Brandy para que el alcohol actúe de conservante.
- Pon cuatro gotas debajo de la lengua, cuatro veces al día.
No lo tragues inmediatamente, procura mantenerlo en la boca unos segundos.
- Si tienes una crisis o un ataque pánico, ansiedad o
cualquier otro malestar emocional, puedes tomar cuatro gotas adicionales cuando
se dé el caso.
- Procura tomarlas siempre entre comidas.
- La forma más efectiva de obtener resultados es con
constancia y regularidad.
Efectos de
las Flores de Bach
Al iniciar un tratamiento con flores de Bach se pueden notar
algunos efectos que, lejos de ser adversos, confirman el efecto del
tratamiento. Estos son algunos síntomas:
- El problema emocional que se quiere tratar puede
manifestarse más severamente los primeros días de tratamiento.
- La persona tratada puede manifestar cambios de humor,
llanto, risa, euforia o algún tipo de desarreglo emocional los primeros días de
tratamiento.
- Tendencia a la introspección.
Estos efectos manifiestan el inicio de lo que los terapeutas
florales llaman catarsis, o limpieza emocional del paciente. Los terapeutas
recomiendan intentar sobrellevar los primeros días de tratamiento aunque estos
síntomas aparezcan, aunque, si se hacen insoportables, se puede disminuir la
dosis o cambiar la mezcla que se haya elaborado, ya que también cabe la
posibilidad de que no sea la más acertada.
Advertencia
Desde luego, te recomendamos que, en caso de depresión
severa o malestar emocional grave no recurras a las flores de Back como
tratamiento exclusivo, sino que te pongas en manos de un profesional y de
manera complementaria investigues en tu enfermedad, y en las distintas
disciplinas a las que puedes recurrir para tratar de reponer el equilibrio con
todas las herramientas que tengas a tu alcance.
Recuerda que no se han escrito efectos contraindicados en
caso de seguir otro tipo de tratamientos, por lo que, a pesar de lo que dice la
ciencia, nunca está de más explorar nuevos territorios, sobre todo si son, como
lo es en el caso de las flores de Bach, una terapia suave y que no conlleva
peligro.
Aunque el efecto placebo, tal y como sugiere la comunidad
científica, sea la clave, no debemos descartarlo, pues si creemos en la energía
y en el poder de la naturaleza, y esa misma creencia nos conduce a la sanación,
hemos de concluir que cualquiera que sea el camino que nos lleve al bienestar
es, sin duda, un camino acertado.